IQS participa junto a otros centros de investigación tecnológica y medica de Barcelona en un proyecto muy avanzado y pionero en Europa, para la fabricación y utilización de una placenta artificial que garantice la supervivencia de los recién nacidos prematuros extremos
A pesar que más del 90% de los embarazos llegan a término con normalidad, las complicaciones durante la vida fetal son aún un riesgo, con la prematuridad extrema como uno de los principales problemas que aún están por resolver. En realidad, un recién nacido prematuro extremo es un feto con menos de un kg de peso, con órganos poco desarrollados y que tiene que sobrevivir en un entorno muy antinatural para él.
Disponer de modelos de placenta artificial es una idea que surgió ya hace tiempo, pero que solo ahora se considera factible, debido a los avances técnicos y científicos conseguidos en los últimos años. Hasta ahora, había tres grupos de investigación en el mundo trabajando en la creación de estos modelos, en Estados Unidos, Australia y Japón.
Con esta idea de crear un entorno artificial similar al uterino, donde el recién nacido puede conseguir el suficiente grado de madurez para poder sobrevivir, se ha creado en Barcelona el proyecto Caixa Research Placenta Artificial, liderado por BCNatal Fetal Medicine Research Center (grupo de investigación del Hospital Sant Joan de Déu y del Hospital Clínic de Barcelona), donde colaboran diversos centros de investigación, entre otros IQS, la Universitat Politécnica de Catalunya (UPC) y el Institute for Bioengineering of Catalonia (IBEC). Se trata del primer proyecto en Europa con el objetivo de fabricar una placenta artificial que garantice la supervivencia de los recién nacidos prematuros extremos, un gran reto médico y tecnológico que requiere la experiencia de muchas disciplinas – médica, biomédica, ingeniería y bioingeniería –. El proyecto cuenta con el impulso económico de la Fundación “la Caixa”
Aportaciones de IQS y primera fase del proyecto
Las aportaciones de los investigadores de IQS vienen de la mano de dos grupos de investigación: por un lado, el Grupo de Ingeniería de Materiales – GEMAT – coordinado por el Dr. Salvador Borrós y la Dra. Nuria Agulló, que trabaja en la selección y el desarrollo de los biomateriales necesarios para la creación de la bolsa amniótica que sostendrá al feto. Por otro lado, el Grupo de Ingeniera de Procesos Industriales – GEPI – , coordinado por el Dr. Guillermo Reyes, que se encarga del desarrollo del prototipo de placenta a utilizar, diseñado y fabricado mediante procesos de fabricación aditiva/impresión 3D, que incluirá una serie de dispositivos destinados a las conexiones con los fluidos y otros componentes de esta nueva placenta artificial.
Ambos grupos aportan su experiencia en estos dos ámbitos para poder superar el reto que representa reproducir las condiciones de la placenta materna con materiales biocompatibles.
El proyecto se encuentra en su primera fase, en el desarrollo y la validación experimental del prototipo de placenta artificial. Hasta ahora, los resultados son muy satisfactorios, y los integrantes han conseguido ya mantener con vida un feto de oveja durante varias horas, gracias a este modelo experimental.