“Es un honor que la institución donde he cursado mis estudios y he sido profesor tantos años me escoja como Director General. Estoy muy feliz y agradecido por las muestras de confianza recibidas”
¿Como afronta el Dr. Salvador Borrós este nuevo rol como Director General de IQS?
En primer lugar, es un honor que la institución donde he cursado mis estudios y he sido profesor tantos años me escoja como Director General. Estoy muy feliz y muy agradecido por todas las muestras de confianza que he recibido.
Es un gran reto para mí, sin duda, porque teniendo mi trayectoria consolidada como profesor, investigador y emprendedor, nunca he afrontado una posición de Dirección General como esta. Y, por tanto, ahora tendré que compaginar las diferentes vertientes de mi carrera con ponerme al servicio de todos e intentar que IQS siga con unos objetivos claros y con su misión en los próximos años.
Además, este año/curso es especialmente complicado debido a la pandemia que estamos viviendo globalmente. IQS, desde el primer día del primer confinamiento del mes de marzo, ha hecho un trabajo enorme por adaptarse y para que los alumnos disfruten de la formación de calidad, aunque no sea presencial, para hacer salvaguarda de las prácticas y que los alumnos la pudiesen seguir haciendo, como hemos hecho en esta segunda ola. Toda esta situación es muy preocupante, per a la vez esperanzadora porque IQS ha respondido perfectamente y lo seguiremos haciendo. Me siento muy orgulloso de esta respuesta.
Cuenta usted con una consolidad trayectoria como profesor, investigador y emprendedor. Con esta experiencia transversal, ¿cuál será la nueva hoja de ruta para promover aún más la combinación de las tres vertientes en el futuro de IQS
Realmente, este ha sido el leitmotiv de mi vida: encontrar el equilibrio entre ser profesor, investigador y emprendedor. Esta triple característica es la que me define personalmente, y es esta dinámica la que querría transmitir al conjunto de IQS: no hay compartimentos estancos, ni líneas prioritarias. Tenemos que reforzar IQS como un conjunto y hacer partícipes de este refuerzo a todos los miembros del staff, sean profesores, tengan trayectoria de investigación o sean emprendedores, y a todos los que hacen otras tareas esenciales, que permiten que el Centro sea quien es.
Promoveremos una docencia no solo de calidad, que ya tenemos, sino con una exigencia responsable frente a esta calidad; dedicaremos muchos esfuerzos a potenciar IQS como centro investigador de referencia.
Y, evidentemente, potenciaremos que sea también una referencia desde la perspectiva del emprendimiento, tanto con las iniciativas ya consolidadas – como es la división IQS Tech Factory–, como con otras nuevas. Queremos que nuestros alumnos vean que el emprendimiento es también una salida posible, que genera riqueza y que permite trabajos de alta cualificación, muy adecuados en momentos tan complicados como los que nos toca vivir ahora.
Como profesor, ¿cuál cree que es el mayor reto al que se enfrenta IQS en este nuevo curso que justo ha empezado?
El mayor reto es evidentemente mantener los estudiantes motivados con esta docencia que será presencial, o virtual, o con formato mixto… y que haremos como sea. Este es el gran reto. Hemos de conseguir también que la situación no desanime a los profesores, para que sigamos manteniendo el nivel que hemos conseguido hasta ahora.
Como ya he dicho antes, no puedo estar más orgulloso del profesorado del centro, ahora como Director General, y espero que sigan con la labor que los alumnos tanto aprecian
Como investigador, ¿cuál es su ideal de investigación universitaria?
Hace unos cuantos años, un profesor de IQS, el Dr. Condal, preguntó que era más importante: ¿la teoría? ¿la práctica? Él dijo “y, lo más importante es la teoría y la práctica”.
En referencia a la pregunta, mi ideal es la unión y equilibrio entre la investigación básica y la investigación aplicada, que realmente tenga un impacto positivo en la sociedad y que además genere una dinámica positiva desde el punto de vista de la misión de IQS. Y, sobre todo, con una vertiente importante de enfoque hacia la sociedad, para que no se quede solo en publicaciones de artículos y conocimiento del profesorado e investigadores, si no que tenga un impacto claro en el conjunto de la sociedad.
Como emprendedor, ¿Qué consejo daría a las nuevas generaciones?
El primero de todos, tener buenas ideas. No tener miedo, y pensar que ‘vale la pena’: enfrentarte a un nuevo reto, saber que el reto es tuyo, y que, con ayuda de otros claro, tú lo puedes llevar a cabo y conseguir ese impacto en la sociedad. ¡Todo esto no tiene precio!
Si ahora me preguntan “¿Quieres ser emprendedor?”, y sabiendo que lo he hecho muchas veces, con más o menos éxito y a menudo sufriendo mucho, ¡yo diría que sí! ¡Sin dudar! Porque es a la vez una vivencia que llena por dentro, aunque el camino sea normalmente muy duro, que da muchas satisfacciones y que, al final, lo hacemos porque creemos en el proyecto y porque el proyecto es nuestro.
Para acabar, como Director General, ¿qué valores de la misión de IQS serán los que más quiere potenciar?
La misión de IQS bebe de los cuatro pilares de la Compañía de Jesús, resumidos en el paradigma de Ledesma-Kolvenbach, y creo que la educación en IQS debe potenciarlos en nuestros estudiantes:
- Una vertiente útil (Utilitas). Nuestros estudiantes deben ser formados para resolver problemas y estar atentos a las necesidades de la sociedad que les ha tocado vivir.
- Un deseo de promover la justicia (Justitia). Nuestros estudiantes (y el resto de miembros de IQS) deberíamos aprender a pensar, juzgar y actuar en favor de los derechos de los otros.
- El espíritu humanista (Humanitas). La formación se enmarca en un momento y en una sociedad concreta y la materia prima son las personas. La formación no puede olvidar a las personas.
- La consciencia de la dimensión espiritual de la formación de un centro como el nuestro (Fides).
Finalmente, quería potenciar en todos los niveles de nuestra institución un concepto profundamente Ignaciano como es el Discernimiento. Debemos ser capaces de sospechar que no todo es como parece a primera vista, sino que toda experiencia – y más aún en la vida espiritual – es compleja y necesita clarificarse.