Saltar al contenido

Estudios

Determinación de la biodegradabilidad de residuos industriales peligrosos

17 mayo 2019

IQS y ATLAS GESTIO MEDIAMBIENTAL SL establecen un convenio de colaboración para desarrollar una metodología que determine de manera fiable si la materia orgánica presente en un residuo es o no biodegradable, y si éste es apto para poder ser gestionado correctamente en su depósito controlado de residuos peligrosos de Castellolí.

Imagen aérea del depósito controlado de Castellolí
 

La estabilidad biológica de un residuo determina hasta qué punto la masa orgánica fácilmente biodegradable se descompondrá. Un residuo se considera estable si contiene principalmente material recalcitrante o humus y no es capaz de mantener una actividad microbiana elevada.

La estabilidad biológica de los residuos sólidos es uno de los principales aspectos a considerar, cuando este residuo debe ser depositado en un depósito controlado, y está relacionada con la evaluación potencial de emisión a largo plazo y el impacto ambiental de los propios depósitos.

Para gestionar un material en un depósito controlado de residuos es necesario que aquel haya alcanzado un alto nivel de estabilidad, para reducir su impacto medioambiental (generación de olor, autocalentamiento, autocombustión, producción de biogás, generación de lixiviados y recrecimiento de patógenos), es decir, entre otros parámetros, asegurar que no sea biodegradable.

En el campo de las aguas residuales, la utilización del parámetro demanda biológica de oxígeno a 5 días (DBO5) está totalmente aceptada para la determinación de la materia orgánica biodegradable. En el campo de los residuos sólidos, un parámetro que se utiliza para evaluar la biodegradabilidad es la relación entre la demanda biológico de oxígeno a 5 días y la demanda química de oxigeno (DBO5/DQO) del lixiviado del residuo. Sin embargo, este parámetro solo es representativo de la biodegradabilidad de la parte soluble en agua y, por tanto, no tiene en cuenta otros componentes del residuo, como podrían ser aceites y grasas o hidrocarburos.

Pero:

  • No existe un único criterio establecido para la determinación de la biodegradabilidad de los residuos sólidos antes de su gestión en depósito controlado.
  • La mayoría de los métodos propuestos son de larga duración y algunos con una cantidad de nuestra reducida que, en el caso de un residuo heterogéneo, difícilmente será representativa.

En este marco, la empresa ATLAS GESTIO MEDIAMBIENTAL SL e IQS han establecido una colaboración para desarrollar una metodología que permita determinar de forma fiable si la materia orgánica presente en un residuo es o no biodegradable, para poder ser gestionado correctamente en su depósito controlado de residuos peligrosos.

Uno de los equipos más utilizados para la determinación de los índices respirométricos son los sistemas Oxitop. Concretamente, con el sistema OxiTop ® Control se pueden determinar estos índices en fase sólida (AT4) o en fase líquida (OUR, DBO, LCRI7)

Se trata de los índices más citados en la legislación, son de corta duración y la técnica para determinarlos no es compleja. Está basada en la determinación de la variación de presión en el interior del frasco, producida por la reacción del CO2 generado en la respiración del residuo (si éste se está degradando) con la solución de NaOH contenida en el frasco.

De esta forma, es bastante sencillo establecer si el residuo se está degradando, o no, y si es factible de ser gestionado en un depósito controlado.

Una vez la metodología haya sido validada por la Administración, puede convertirse en un futuro en método de referencia para el resto de depósitos controlados.

 

ATLAS GESTIO MEDIAMBIENTAL SL gestiona el primer depósito controlado de residuos peligrosos de Cataluña, actividad declarada servicio público por la Generalitat de Catalunya. En palabras de su director, el Sr. Xavier Mundet, “IQS nos aporta un grado de experiencia y conocimiento fundamental para poder ofrecer una metodología contrastada, que nos permita ofrecer a nuestros clientes más conocimiento para conseguir la mejor gestión posible de sus residuos. Disponer de un procedimiento validado por IQS, para determinar la parte biodegradable de un residuo, también mejorará mucho la propia gestión de nuestro depósito”.