Tenemos que estar orgullosos de tener compañeros de investigación por todo el mundo, con acuerdos de colaboración y compromisos de trabajo basados en la confianza y en las apuestas de futuro, consolidándose año tras año.
Actualmente, la colaboración internacional entre universidades es una práctica habitual en todo el mundo. Todos los centros universitarios cuentan con unidades dedicadas a establecer, consolidar y gestionar vínculos con otros centros afines. Este tipo de vinculación con otros centros incrementa la calidad de los estudios, el potencial de la investigación y las perspectivas de los estudiantes i del profesorado.
Para nuestros estudiantes representa abrir la puerta más allá del campus IQS, realizar una parte de su formación aprendiendo otras vías para adquirir conocimiento y experiencia, salir de la zona de confort y relacionarse con otras culturas. Para la mayoría, es la primera experiencia de vivir fuera de casa. Esta práctica, que años atrás solo algunos podían llevar a cabo, actualmente se ha convertido en una vivencia casi imprescindible y a menudo muy bien valorada por las empresas, cunado en los procesos de selección evalúan a los candidatos.
En el ámbito de la investigación, las colaboraciones internacionales tienen aún más historia y más recorrido de futuro. Inicialmente, se establecían cuando el personal investigador asistía a congresos de ámbito internacional y, fruto de los intercambios de información técnica y de las ponencias y presentaciones, surgía un interés para trabajar conjuntamente. Se buscaba la colaboración para aprovechar las experiencias de cada uno y las posibilidades científicas y tecnológicas de cada centro. Los proyectos de investigación conjuntos, las estancias en otras universidades para aprender nuevas técnicas, el intercambio de estudiantes de doctorado, formar parte de un tribunal de doctorado, forjar una colaboración para solicitar financiación pública para un proyecto conjunto, entre otros, son algunos de los beneficios que todos obtenemos. Actualmente, ya es una práctica consolidada, necesaria y muy bien valorada.
Hace unos días, tuve la oportunidad de acompañar a una delegación de IQS integrada por profesorado, especialmente del Departamento de Ingeniería Industrial de IQS, al centro ICAM de Toulouse, en el marco de la celebración ICAM Research Days. Durante estas jornadas, se presentaron múltiples proyectos de investigación en curso que llevan a cabo profesores y estudiantes de ICAM. También tuvimos la oportunidad de explicar a la audiencia qué es IQS y como trabajamos. Algunos ya nos conocían, para otros, todo fue una novedad. Incluso el profesorado, con quien ya hace años que tenemos una trayectoria de colaboración, quedaron sorprendidos de todo lo que hacemos en IQS. Y es que, a veces, pienso que no sabemos vendernos bien, que tenemos que invertir aún más en mostrar todo lo que tenemos y lo que sabemos hacer. Les presentamos nuestras líneas de investigación y pudimos conversar sobre intereses comunes. Lo mejor de todo es ver el resultado unos meses después y saber que no solo nos hemos conocido, y que el viaje ha servido para mucho más. Impulsaremos aún más el intercambio de estudiantes, especialmente los que están en los últimos cursos, pero sobre todo iniciaremos nuevas colaboraciones con otros profesores, compartiremos proyectos de investigación y creceremos. Porque sabemos que juntos podemos llegar más lejos.
Este es solo un ejemplo entre más de un centenar de colaboraciones que tenemos con otros centros universitarios y de investigación de todo el mundo. Acuerdos de colaboración y compromisos de trabajo conjunto basados en la confianza inicial, en apuestos de futuro, y que se consolidan año tras año cuando los resultados nos dicen que tenemos que estar orgullosos de tener compañeros de investigación por todo el mundo.
Dra. Núria Vallmitjana (Directora de IQS Tech Transfer)